Las granulaciones aracnoideas o de Pacchioni son protusiones de la membrana aracnoidea hacia el interior de los senos durales que efectúan la filtración y reabsorción del líquido cefalorraquídeo. Normalmente miden pocos milímetros, pero pueden alcanzar un tamaño suficiente para ocupar y dilatar los senos venosos durales e incluso provocar expansión de la tabla interna craneal, denominándose entonces granulaciones aracnoideas gigantes (GAG)1. En estos casos pueden ser confundidas con lesiones de osteólisis, neoplasias o afecciones de los senos de la duramadre tales como las trombosis2.
Una adecuada correlación clínico-imagen mediante resonancia magnética (RM) permite diferenciar las GAG de otras afecciones más graves, evitando así procedimientos invasivos innecesarios.
No suelen precisar tratamiento3.
Niña de 4 años remitida por su pediatra por protuberancia ósea de 2 meses de evolución, no dolorosa. Exploración física: Induración de consistencia ósea de 1cm de diámetro en región parietal izquierda. En la radiografía simple se aprecia hiperlucencia a dicho nivel con adelgazamiento cortical asociado y se aconseja completar estudio. Se realiza tomografía computarizada (TC) en la que se diagnostica GAG (fig. 1).
Niña de 6 años remitida por su pediatra por protuberancia craneal de crecimiento progresivo de meses de evolución, sin otra sintomatología asociada. Exploración física: Induración de consistencia ósea de 2cm de diámetro en región parietal derecha. Aporta radiografía (Rx) que informa como protuberancia ósea parietal derecha con probable adelgazamiento cortical (fig. 2). Se completa estudio con RM que se informa como GAG (fig. 3).