Presentamos el caso de un recién nacido a término, sin antecedentes de interés, que ingresó al nacimiento por distrés respiratorio autolimitado. En la exploración física inicial se objetivan varios defectos de osificación tipo craneotabes en calota hacia región parietal posterior bilateral y vértex. No presentaba ningún estigma cutáneo de defectos del tubo neural, con una exploración neurológica sin alteraciones. Se solicita ecografía transfontanelar, radiografía de cráneo y tomografía computarizada craneal siendo compatibles con el diagnóstico de cráneo lacunar, sin otras alteraciones asociadas (figs. 1-3), realizando analítica sanguínea completa, normal.
El cráneo lacunar es un defecto congénito de la osificación que se presenta con un cráneo fenestrado por adelgazamiento de la tabla interna, más frecuentemente a nivel frontal y parietal. Su etiología es incierta1. La importancia de su diagnóstico radica en sus posibles asociaciones, como defectos del tubo neural (mielomeningocele, encefalocele), malformación de Arnold-Chiari, craneosinostosis o escoliosis, debiendo realizar pruebas complementarias para descartarlas. No obstante, lo podemos encontrar como hallazgo aislado como en el caso descrito1–3. Suele resolverse en la infancia con el remodelamiento craneal, si bien se ha visto persistencia hasta la edad adulta en algún estudio, asociando más frecuentemente patología en estos casos2.