Varón de 2 años, sano, remitido por su pediatra por malformación genital (fig. 1). La exploración evidenció una bolsa escrotal derecha con teste en su interior de tamaño y consistencia normal. El rafe escrotal se encontraba ligeramente desplazado hacia la izquierda. Lateralmente, se visualizaba una tumoración de 2×3cm, compatible con un testículo ectópico de localización inguinal rodeado de piel escrotal. Se palparon un epidídimo y un deferente de características normales. La ecografía confirmó la sospecha clínica. Se procedió a la intervención quirúrgica del paciente, realizando exéresis de la piel y tejido celular subcutáneo comprendido entre ambos hemiescrotos, y desplazamiento medial y caudal del escroto ectópico (fig. 2). Se muestra el resultado a los 6 meses de la corrección quirúrgica (fig. 3).
La criptorquidia, definida como el descenso incompleto del testículo, afecta al 3% de los recién nacidos a término. Los testículos ectópicos son testes localizados fuera del teórico trayecto de descenso habitual. La localización más frecuente es la perineal seguida de la abdominal y femoral de forma ipsilateral o contralateral. Estas anomalías presentan una bolsa escrotal con 2 hemiescrotos normoconformados1. Lo excepcional del presente caso, es la localización inusual del testículo que, a su vez, está rodeado de piel escrotal (fig. 1). Solo existe un caso en la literatura donde se describe su tratamiento quirúrgico2. Esta corrección es posible, con un resultado estético satisfactorio (figs. 2 y 3). Se aconseja realizar ecografía del tracto urinario para descartar anomalías asociadas que son más frecuentes en pacientes con malformaciones genitales3.